Se dice que el que persevera alcanza, y en nuestro caso así es. Después de meses de trabajo, haciendo nuestro primer trabajo fílmico, hemos presentado el resultado a nuestros patrocinadores. Teníamos los nervios de punta, porque hemos invertido mucho trabajo y esfuerzo, pero también alma y corazón. Poder mostrar de forma casi real y vívida el resultado del proyecto de la Ruta del Chocolate a todas las personas que nos apoyaron y a los que conocimos en el viaje y quedaron en nuestro corazón, era para nosotros de vital importancia.
Stockwerk, el lugar donde presentamos el docu, nos ofreció las condiciones perfectas para el estreno y para llevar a cabo diferentes discusiones. Recibimos a nuestros VIP con una aperitivo clásico boliviano llamado „Chuflay“, una mezcal de Singani (brandy boliviano), con limonada y una rodajita de limón. La bebida perfecta para una cálida tarde de verano.
Después de un par de palabras introductorias, dimos paso a los 45 minutos de viaje a través de la Ruta del Chocolate. Fue una experiencia maravillosa llevar de la mano a nuestros patrocinadores y poder presentarles todas aquellas personas de las regiones turísticas que como nosotros, sueñan con la Ruta del Chocolate. Las exclamaciones de „aah“ y „Ooh“ en diferentes pasajes del documental, así como las sonrisas que despertaron las imágenes, las recibimos con alegría y alivio como una señal de que logramos llegar y mover algo en las personas. El aplauso final nos confirmó este sentimiento y yo, Kerstin, estaba realmente conmovida de ver los rostros sonrientes y los ojos resplandecientes de júbilo.
Ese fue el momento perfecto para disfrutar de un pedacito del famoso chocolate El Ceibo. Habíamos traídos diferentes clases de chocolate para dar como prueba desde Bolivia, y la emoción y satisfacción que sintieron nuestros patrocinadores, no fue para nosotros sorpresa alguna. Y como el chocolate une, así mismo empezaron a surgir rápidamente las conversaciones.
La película le cayó tan bien a nuestros amigos como el chocolate y discutimos con intensidad al candor de mejillas enrojecidas. Hablamos de turismo responsable, de la importancia de los derechos humanos en los diferentes destinos turísticos, de la vida de los campesinos y campesinas productores de cacao y de su largo camino hacia el sostenimiento responsable. Naturalmente no pudimos contestar todas las complejas preguntas que nos hicieron, ni tuvimos la receta rápida y perfecta para el turismo responsable y sostenible a nivel mundial. Sin embargo, fue muy inspirador y conmovedor para nosotros ver como nuestro documental hizo que las personas se emocionaran y con gran compromiso hablaran sobre el tema. Fue un sentimiento maravilloso.
En el otoño/invierno 2016 se pasará el cortometraje en Viena, en un evento dedicado al turismo. Todavía no tenemos la fecha exacta, pero en nuestra plataforma de Facebook estaremos informando las actividades correspondientes para que puedan apuntarlas en su calendarios y tomarse libre.
Estamos ansiosos de conocerte en nuestro próximo evento. A nuestros patrocinadores un agradecimiento enorme por la maravillosa tarde a través de la Ruta del Chocolate.